Educación para la salud, promoción de medidas preventivas e higiénicas y del saneamiento básico son las principales acciones que se pueden llevar a cabo para evitar el contagio del virus del Zika, que ha provocado una alerta sanitaria de la Organización Mundial de la Salud en todo el continente americano, salvo Canadá y Chile.
La Organización Mundial para la Salud (OMS) ha alertado que el virus del Zika se extenderá, a excepción de Canadá y Chile, a todos los países del continente americano, todas la zonas donde hay mosquitos Aedes aegypti, que transmiten la enfermedad, así como otras del mismo tipo como el dengue, el chikungunya y la fiebre amarilla.
A juicio de la Fundación para el Desarrollo de la Enfermería (FUDEN), las profesionales de enfermería son un instrumento imprescindible para el control de la transmisión del zika, tal y como indica Carmen Cantabrana, coordinadora de proyectos de cooperación de FUDEN para América: “Las enfermeras están capacitadas en salud comunitaria y otros temas de salud. Están en contacto directo con la población, especialmente en zonas aisladas, vulnerables y rurales. Por ello, son esenciales en todas las actividades dirigidas a prevenir cualquier virus contagioso, como es el caso del zika”.
De hecho, en la actualidad, FUDEN está trabajando para apoyar el abordaje de esta alerta en países como Nicaragua, donde está ejecutando proyectos de cooperación enfermera en Zelaya Central con la Junta de Extremadura y la Xunta de Galicia. FUDEN ya tiene experiencia previa en el abordaje de este tipo de alertas, pues en 2014 ya trabajó con las enfermeras de República Dominicana para prevenir la transmisión del virus del Chikungunya. (FUDEN/DICYT)