COLOMBIA En lesiones tan comunes en los deportistas como la que sufrió Falcao García, la innovación permitiría contar con un sustituto artificial del fibrocartílago que ayude a su regeneración y produzca menos rechazo del paciente. El Grupo de Ingeniería de Tejidos de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) trabaja en el desarrollo de estos soportes, conformados por colágeno tipo 1 y 2, como una alternativa a los trasplantes meniscales.
“El menisco, una estructura que se encuentra en la rodilla, contribuye a la correcta articulación de los huesos del fémur y la tibia, de tal manera que evita el desgaste del cartílago, producto de un contacto directo”, explica Martha Isabel González Duque, doctorante en Ciencias Farmacéuticas de la U.N. cuyo trabajo es dirigido por la profesora Martha Raquel Fontanilla Duque.
Gracias a su forma semilunar y a una constitución de fribrocartílago, conformado esencialmente de colágeno tipo 1 y 2, con una zona externa provista de vasos sanguíneos y una interna desprovista de ellos, los meniscos permiten que la rodilla soporte las fuerzas y cargas que se ejercen sobre ella, y por tal razón, tiene gran susceptibilidad a sufrir desgarros o rupturas en distintas zonas, asociadas usualmente con lesiones de ligamentos.
Cuando hay una lesión de ligamento cruzado anterior, tan común entre los deportistas y cuyo ejemplo más reciente es el del futbolista Falcao García, el menisco se puede lesionar y difícilmente logra recuperarse, debido a que el desgaste del cartílago se acelera y se produce una osteoartritis de rodilla que con frecuencia conlleva un remplazo de la articulación.
Aunque se recomienda un tratamiento de reposo y terapia cuando el desgarro no es significativo, también se suelen realizar procedimientos quirúrgicos para hacer un corte parcial o total en la zona del desgarro y evitar que el dolor y la limitación funcional continúen.
En Colombia existe la opción de efectuar un trasplante meniscal a partir de un donante cadavérico, pero aún así la posibilidad de que se genere un rechazo inmunológico es alta, sumado al hecho de que conseguir el tejido no es tan sencillo.
En la década de los noventa surgió la opción conocida como “sustitutos meniscales artificiales o implantes meniscales de colágeno”, compuestos en gran medida de colágeno tipo 1 que tienen un costo promedio de siete millones de pesos, y que en Colombia son difíciles de conseguir.
Tales implantes son eficientes en el proceso de regeneración y están indicados en más del 50 % de los desgarros meniscales, pero aún requieren mejoras en el diseño microestructural.
«Los estudios realizados han demostrado que estos soportes son bioactivos, o sea que les permite realizar interacciones con tejidos vivos y estimular la formación de nuevo colágeno”, destaca la doctorante.
Actualmente, los soportes desarrollados por el Grupo de Ingeniería de Tejidos de la U.N. se encuentran en fase de diseño, desarrollo y evaluación de bioactividad, parte de cuyos avances están asociados con la pasantía que la doctorante realizará en los próximos meses en el Leibniz-Institute German Collection of Microorganisms and Cell Cultures de Brunswick, Alemania, gracias al apoyo de la Vicerrectoría de Investigación de la U.N. y la Fundación de Ciencia y Tecnología Colombo-Alemana (FunCyTCA). “Evaluaremos la bioactividad de las células con el soporte en condiciones de laboratorio para establecer si existe una interacción que indique alguna respuesta biológica que permita acoplarse”, comenta la doctorante.
En tal sentido, la doctorante llama la atención sobre la gran infraestructura para cultivos celulares que se encuentra a disposición de los investigadores en el Leibniz Institute DSMZ, factor que resulta esencial para que la investigación pueda avanzar de manera más rápida, a partir del uso de células madre de médula ósea, las cuales han sido previamente procesadas en condiciones de laboratorio. “Además de contar con una infraestructura que nos permitirá realizar la investigación en un solo lugar, el Leibniz Institute cuenta con una serie de protocolos que es importante conocer y valorar con respecto a los nuestros”, puntualiza la doctorante. (UN/DICYT)